Cudillero, el pueblo más fotografiado de España
Cudillero |
Dicen que Cudillero, en Asturias, es el pueblo más fotografiado de España. No sé si sera cierto, lo cierto que es uno de los más bonitos. Esta semioculto por montañas, de tal forma que cuando te diriges a él no lo ves. Por eso es
interesante dar un rodeo y quedar flechado por su magia y acceder a él desde abajo, desde el puerto. Una vez allí, se puede aparcar y dirigirse a la Plaza de la Marina, el impacto visual de sus casas colgando de la montaña, cautivan a cualquiera. Se puede observar que las casas están encaramadas en tres laderas formando un anfiteatro. Y si se llega aunque sea en verano en un típico día astur con niebla y lluvia la magia se dispara.
Los habitantes de Cudillero se les conoce como “Pixuetos“,
aunque hay muchas versiones parece que tiene su origen en Pix = Pez. Y
no es de extrañar que así sea ya que este ha sido desde siempre uno de
los principales puertos pesqueros del Cantábrico.
Aún hoy, cuando llegan los barcos, suele haber un camión frigorífico
esperando en la lonja dispuesto a llevar el mejor pescado a otros puntos
de España, principalmente Madrid.
Su laberinto de callejuelas, como en una kasba marroquí serpentea entre las casas, en muchas de las cuales quedan restos de curadillo, un pez escualo que se deja secar durante cinco meses.
Como monumentos podemos ir a la zona de El Pitu donde está el espléndido conjunto palaciego de los Selgas. En el pueblo esta la capilla del Humilladero el edificio más antiguo, y la Iglesia gótica de San Pedro del siglo XVI de una sola nave y reconstruida tras la guerra civil. Por eso tiene una forma y un aspecto de muy nueva, nueva, vamos que el restaurador no fue muy bueno que digamos.
Puerto pesquero en la niebla |
Pero lo más interesante es pasear por el pueblo, por sus calles, por su puerto y ver el bravío Mar Cantábrico en plena forma. Saliendo de la Plaza de la Marina a izquierda se dirige al puerto. Donde pequeñas barcas pesqueras se alinean una junto a otra. En el puerto pesquero hay numerosas tascas. Volviendo al anfiteatro de casas; por cierto se recibe el nombre de “anfiteatro” pues las casas simulan los palcos y la
plaza sería la escena. Una de las cosas que más caracteriza este lugar
es el colorido que lucen las casas sobre todo en las ventanas y en los
aleros. Volviendo a la Plaza de la Marina, podemos realizar ahora la Ruta de los Miradores, que esta señalizada y que sube entre casas y laderas, saliendo en cada uno de ellos hacia el mar.
Después en algún restaurante se puede comer en la Plaza se encuentra el restaurante Isabel, que borda uno de los platos típicos el paté de cabracho. En Cudillero y en Asturias llueve de continuo, como se puede apreciar en las fotografías.
Si se duerme en Cudillero, para el día siguiente a la salida hay otra maravilla natural: el Cabo de Vidio. Un acantilado de 80 metros, con un faro y una cueva. Junto a el se encuentra una de las playas más misteriosas de Asturias, la del Silencio.
Finalmente os dejo una curiosa señal de tráfico que se encontraba en el puerto de Cudillero, desde luego si el conductor se encuentra con este "peligroso" animal tardará en pasar.
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